Km.12 Perfume y memoria. Hablamos de Otro perfume de hablar de Sesi García, 2014, Eirene Editorial.


El pulverizador de su Chanel nº5 está seco. La luz tenue ensombrece los pliegues de una cama deshecha. Entre las sábanas, una figura desnuda sostiene un libro. El roce de sus dedos con las páginas se detiene por el ruido del teléfono. Norma Jeane descuelga el auricular con los ojos clavados en las páginas...

Otro perfume de hablar de Sesi García (San Sebastián de los Reyes, 1992), título extraído de un verso de Blas de Otero,  se nos presenta como la continuación de su ópera prima Tabaco de liar (Canalla ediciones, 2012) y se asienta como el inicio de una obra de madurez. Sin abandonar los temas que regían su primer trabajo, el poeta se adentra en una poética más reflexiva, herencia de Claudio Rodríguez y Antonio Machado, donde su capacidad para hacer suya la realidad y el entorno, el tratamiento del deseo, así como la preocupación por la belleza, serán los puntos claves de su obra. Sin embargo, en contra del término “poesía de la experiencia”, me inclino a definir la poética de Sesi con el término acuñado por el poeta y editor italiano Emilio Coco: la línea clara. Mediante este enfoque el autor huye de una retórica adornada y busca, mediante la sencillez, una conexión inmediata con el lector.

Uno de los primeros aspectos en los que uno repara cuando se sumerge en estas páginas, es el tratamiento del deseo mediante la presencia recurrente de la mujer. En palabras de Francisco Umbral, podríamos decir que en los ojos del poeta siempre vive una mujer: “La mirada es la única forma de posesión completa, total. Ver vivir a la mujer, verla moverse, dentro de una armonía que la circunda, tenerla apresada en la retina, en la pupila, sin que ella lo sepa”. En El sitio más indescriptible de nuestra fe es donde se manifiesta con más intensidad la idea. Encontramos versos que parten desde la reflexión vital “A estas personas en tus ojos ya/ las había encontrado mucho antes de que/ me miraras” a la íntima fragilidad de la ropa sobre la carne “Tu ropa tiene que ser general, / tiene que aprender a escribir en el aire las cosas más fugaces y decirlas de memoria, cuando susurre/ a un cuerpo desnudo, a un cuello que duerme”. Pese al predominio del deseo en este primer conjunto de poemas, encontramos otro de los temas fundamentales de su poesía: la familia. En Lelo, el poeta esboza una imagen de su abuelo que, sin renunciar a la sobriedad del discurso, consigue una atmósfera de lirismo que remata con los versos finales “Sincero has sido siempre con tu nieto/ que nunca dejará de dibujarte/ con sus ceras de amor a los cuatro años/ buscando entre vejez tan amorosa/ el secreto que tienes cuando caminas solo”.

Si consideramos un libro como un viaje iniciático, será a partir de Todo causa de vástagos vitales donde el poeta, sin abandonar los temas mencionados con anterioridad, elabora una línea más introspectiva cuya motivación es, principalmente, el conocimiento personal. No sólo encontramos una renovación en cuanto a la expresividad, sino también en el aspecto técnico y el ritmo. La prevalencia del endecasílabo y la métrica irregular, a menudo por aproximación, así como la ruptura del ritmo mediante el uso constante de encabalgamientos abruptos, se ven interrumpidos por el uso del versículo y versos de arte menor. Encontramos un ejemplo en el poema Gato de poeta  – homenaje al poema de Claudio Rodríguez, Perro de poeta, que dedica a Vicente Aleixandre– donde combina heptasílabos y endecasílabos “Compañero pasivo, / amigo interesado/ Marramaquiz sin mona pero atento”. También destaca el empleo de estrofas sáfico adónicas –incompletas, eso sí– con uso de la rima asonante “Que me regales un libro que tenga/ y una rosa en los labios en la Rambla/ calor, calor, calor, refresco y caña/ y la sorpresa”.

La última parte del libro Poemas de la imaginación propia en Segovia, se une a las dos anteriores mediante el poema La imaginación propia donde, a través del recurso de las anotaciones, consigue crear un nexo sólido que precede a la estancia del poeta en la ciudad. A diferencia de Poeta en Nueva York –y pese a la su evidente influencia en la elaboración de este último apartado–, la visión profundamente humana del poeta consigue crear una intimidad entre hombre y urbe; da la sensación al lector de haber paseado por allí –en caso de no haberla conocido nunca– o de sentir el sabor de su aire en los labios si se conoce. No todas las ciudades están hechas para los hombres.

…Peter Lawford está al otro lado del teléfono. Hay una fiesta en su casa; en este momento es cuñado del presidente. Norma está invitada. Entre leves balbuceos, aún inmersa en su lectura, se niega a asistir y consigue decir unas últimas palabras con dificultad: “Despídeme de Pat, despídeme del presidente y despídeme de ti porque eres un buen tipo”. Entonces cuelga el teléfono, arranca varios poemas del libro y se acuesta sobre ellos. Su aliento se apaga. El pulverizador del perfume permanece seco.



Km.12 Perfume y memoria. Hablamos de Otro perfume de hablar de Sesi García, 2014, Eirene Editorial. Km.12 Perfume y memoria. Hablamos de Otro perfume de hablar de Sesi García, 2014, Eirene Editorial. Reviewed by Anónimo on 1:06 Rating: 5

No hay comentarios:

Con la tecnología de Blogger.